Ubuntu tiene previsto, desde la versión 8.10 (Intrepid Ibex), un mecanismo más fácil de usar, con el que se puede crear una carpeta especial, que recibe el nombre de Private y que en realidad es un archivo cifrado con ecryptfs. Todo lo que guardes dentro de esa carpeta permanecerá invisible para quien pretenda acceder sin iniciar sesión con nuestro nombre de usuario y contraseña.
Instalación y puesta en marcha
Si quieres comenzar a utilizar esta carpeta, lo primero será instalar los componentes necesarios. Esto lo puedes conseguir fácilmente abriendo una ventana de Consola (Aplicaciones > Accesorios > Terminal) y escribiendo lo siguiente:
sudo aptitude install ecryptfs-utils
Una vez completada la instalación, necesitas crear la propia carpeta, lo que conseguirás escribiendo en la terminal la siguiente orden:
ecryptfs-setup-private
Como puedes ver en la siguiente imagen, lo primero que pide el programa es una “login passphrase“. Se refiere a la contraseña que utilizas para entrar en tu cuenta de usuario.
A continuación, se nos solicita la “mount passphrase“, una frase de paso (una contraseña larga, que puede estar formada por varias palabras). Si no escribes nada y te limitas a pulsar Intro, se crea una contraseña al azar del tipo e12b6db2ed4124a539ba2ba97ee129b3
.
Como te indica el texto que aparecerá a continuación en la pantalla, es importante que la anotes y no la pierdas porque, aunque el proceso de montaje del archivo cifrado es automático y no se te volverá a pedir la clave, si hubiese un problema futuro que impidiera dicho montaje automático, sin la contraseña no podrías montar el archivo de forma manual y perderías los datos definitivamente.
Para continuar, y poner a prueba tu nueva carpeta cifrada, sólo tienes que cerrar la sesión de tu usuario y volverla a abrir (o, si quieres, reinicia el sistema).
Cuando vuelvas a entrar en tu cuenta, verás que en tu carpeta personal (Lugares > Carpeta personal), aparece una nueva carpeta llamada Private. Todo lo que guardes en ella estará a salvo de miradas indiscretas…
El truco final
Para la mayoría de los casos, hasta aquí puede ser suficiente, pero si quieres, aún puedes dar una pequeña vuelta de tuerca más. Por ejemplo, puedes hacer que, de forma totalmente automática, todo lo que guardes dentro de la carpeta Documentos, se guarde en realidad dentro de la carpeta Private. ¿Que cómo se hace esto? pues una forma muy sencilla es la siguiente:
- Primero será mover la carpeta Documentos actual hasta la carpeta Private con la siguiente orden (recuerda que para introducirla tienes que abrir la Consola desde Aplicaciones > Accesorios > Terminal):
mv Documentos Private/Documentos
- Y, a continuación, crear un enlace para que la carpeta siga disponible del mismo modo que antes. Así no notaremos la diferencia:
ln -s Private/Documentos Documentos
Como has podido ver, Ubuntu nos ofrece una herramienta muy fácil de instalar y utilizar, que además cumple sobradamente con las espectativas. Espero que te resulta útil.
Via: sliceoflinux