Gesture Cube, el interfaz del futuro se activa con los gestos de la mano
Tom Cruise manejando con las manos una interfaz virtual de ordenador en “Minority Report” o los protagonistas de CSI con sus enormes pantallas táctiles que permiten abrir y manejar aplicaciones con un simple gesto de la mano no son más que un adelanto de cómo va a ser nuestra relación con la tecnología en los próximos años. Si en estos momentos los touchpad se manejan arrastrando los dedos por la superficie táctil de la pantalla siguiendo determinados trazados y geometrías, la interfaz del futuro se manejará simplemente mediante gestos.
Esta es la idea que hay detrás de Gesture Cube. Como su propio nombre indica, es un cubo que siente cuáles son los movimientos de las manos, los interpreta, y nos permite de actuar con diversos dispositivos. En realidad no es más que un prototipo, pero resulta totalmente funcional, y nos muestra cómo se puede utilizar para abrir fotos, gestionar álbumes de imágenes, seleccionar y abrir música, etcétera. Para manejar dispositivos mediante este cubo no es necesario arrastrar las manos por cualquiera de sus caras. Basta con moverlas a corta distancia.
La tecnología que se esconde detrás de este interfaz es sumamente compleja, pero el manejo no puede ser más sencillo. El usuario acerca o aleja la mano del cubo y la mueve por delante, mientras que una serie de sensores detectan la posición instantáneamente y transmiten las coordenadas a la electrónica instalada en el interior. Así, determinados movimientos prefijados, pueden ser programados para ejecutar determinadas acciones como abrir un programa, o mostrar una foto. Detrás de este nuevo invento se esconde tecnología de lectura espacial tridimensional de la empresa alemana Ident, que ha decidido llamarla GestIC.
Los sensores no leen las posiciones de las manos mediante un proceso óptico. En su lugar, el cubo utiliza sensores agrupados de cuatro en cuatro, y capaces de medir la variación en el campo magnético de la piel humana que se produce conforme varía la distancia. Cada orden se compondría en definitiva de dos gestos, uno que selecciona la función, y otro, siempre el mismo, que la activa, como por ejemplo apuntar con el dedo al estilo de cuando se aprieta un botón. Lo interesante de la aplicación de la tecnología en Gesture Cube, es que es posible asociar un dispositivo a cada una de las caras del cubo.
